Centro histórico de la ciudad y con edificios que todavía parecen enseñar como era el aspecto de la ciudad antes de la guerra, en esta zona de la ciduad visitarás tanto el ayuntamiento como la avenida de las tiendas de Hamburgo. Todo ello con la eterna presencia del agua, con el lago y sus canales.
Si bien llegar hasta aquí en metro es realmente sencillo, te recomiendo que pares algunas estaciones antes y vayas andando, ya que el nutrido número de calles que conducen hasta este lugar, también disponen de encanto y para todos los precios. Especialmente en las calles peatonales entre Hauptbahnhof y Rathaus Markt.
Terminado en 1897, el edificio del Rathaus alberga hoy en día tanto el ayuntamiento como el senado de la ciudad de Hamburgo. Su fachada de estilo neorrenacentista destaca tanto por su alta torre y por los toques dorados y rojos.
Supuestamente es ya el sexto edificio que la ciudad de Hamburgo construyó. Los anteriores, en su inmensa mayoría, fueron destruidos por los distintos incendios que atravesó la ciudad en su historia. Esa tradición de incendios se ha plasmado en algunos motivos de la fachada como el fénix encima de la palabra resurgam en la cara frontal de la torre.
Otros de los motivos que destacan en el edificio son las esculturas de los 20 emperadores de Alemania, entre ellos se puede destacar a Carlos V ( Carlos I de España, padre de FelipeII) o también Barbarroja.
Hamburgo no es una ciudad que disponga de grandes plazas, además las pocas que existen son pequeñas. Podría decirse que la plaza que rodea al Rathaus es de las pocas que vale la pena verlas. Durante la navidad podrás ver el más famoso de los mercadillos de toda la ciudad y durante el verano se suceden las temporadas de cine al aire libre. Si no fuera por el clima horrible que tiene la ciudad, este emplazamiento sería el idóneo para más eventos.
Una de las cosas que dota de gran belleza la plaza, es el canal que aparece en uno de sus laterales. Si vienes en un día de verano (o por lo menos no lluvioso) te sugiero que no te gastes el precio de un café en una terraza, sino simplemente siéntate en las escaleras del canal y cómete un helado. Cuando acabes, tan sólo ve por los soportales que se pueden ver desde el otro lado. Desde esa esquina, encontrarás la mejor foto del Rathaus.
También en uno de los monumentos del canal se puede leer el agradecimiento a los 40000 hombres que perdieron su vida por luchar en la primera guerra mundial.
El mercadillo de navidad (Rathaus Weinachtsmarkt), es el más famoso de la ciudad. Recordad una cosa, los alemanes son unos apasionados de la navidad y como en todo el mundo (no como España) celebran a Papa Noel.
El mercadillo de navidad se trata de un lugar a donde los alemanes van a tomar Glühwein, comer unas Wurst y tal vez comprar algún accesorio navideño para su casa. Esta tradición es algo muy común en toda Alemania, durante las navidades siempre tendrás que ir a tomar un Glühwein con tus compañeros de trabajo, con tu familia y con las personas que vengan a visitarte.
Concretamente en el del Rathaus existe mucha animación, es frecuente ver como un Santa Claus atraviesa la fachada del edificio montado en un trineo enorme. Incluso para en mitad del recorrido para dar un discurso. Espectacular.
El problema que puedes encontrarte en este evento es la cantidad de gente, si simplemente quieres probar el Glühwein te sugiero que no vayas a este, porque siempre está lleno. Pero si quieres sentir la más auténtica experiencia de la ciudad, este se convierte en un lugar obligatorio.
Esta es la zona que rodea todo el Alster interior y es la zona de las tiendas exclusivas (es decir, caras) de Hamburgo. Su estilo es un recuerdo de como deberían ser las fachadas de los edificios de Hamburgo antes de la guerra. Con un toque antiguo y nórtico las vista de sus fachadas enamora para apreciarlo correctamente, el siempre presente Alster, invita a dar un paseo por sus orillas. Esta es la zona por la que pasarás y siempre le concederás una mirada.
Las fachadas de los edificios esconden grandes centros comerciales y tiendas de renombre. Marcas como Cartier, Tiffany's, Apple o el centro comercial AlsterHaus tienen allí un espacio propio. Pero la avenida es lo suficientemente grande como para permitir la convivencia de lugares más convencionales, en concreto el centro comercial Europa Passage ya ofrece productos a un precio más asumible.
Si eres un amante de los coches, te invito a que eches un vistazo a los vehículos que pasan por sus avenidas, ya que esta calle tiene la leyenda de albergar la mayor densidad de coches de lujo de Alemania.
Paseos los domingos soleados por las orillas del Alster en esta zona son altamente recomendables. El sentarte en uno de sus bancos, comerte un helado y ver como atardece mientras charlas con tus amigos es una sensación maravillosa.
Otra de las cosas muy recomendables es encontrar el Jim Block para comerte una buena hamburguesa (no te puedes irte de Hamburgo sin comerte una buena hamburguesa). Este lugar se encuentra cerca del ayuntamiento, en una de las salidas del metro que da a Jungfernstieg. No siempre encontrarás sitio, sin embargo no te desesperes, las mesas suelen desocuparse con cierta rápidez, y la ración de patatas y carne te darán fuerzas para el resto de las visitas turisticas.
Esta zona también es de las que más ofrece su espacio para manifestaciones, es frecuente encontrarte aquí con todo tipo de movilizaciones en contra o a favor de casi todo tipo de causas. Esto en Alemania es una cosa que normalmente se hace de forma pacífica y sin tumultos. También existen pequeñas celebraciones que ocupan esta zona y permiten tener todavía más diversión en esta parte de la ciduad.